Luis Suárez recibió en su casa a Lionel Messi, Sergio Busquets y Jordi Alba este lunes, junto con sus respectivas parejas. El motivo: una despedida, según informó a Azteca Deportes una fuente cercana al club.
Sin embargo, a pesar de la firmeza del argentino por salir del Barcelona, la situación no es tan sencilla, pues el Manchester City, equipo que parece estar más cerca del rosarino, por el momento no tiene pensado en soltar un centavo, ni irse a juicio y correr el riesgo de tener que pagar los 700 millones de euros que vale su cláusula de recisión de contrato.
Como política verbal, el club inglés no pretende fichar a ningún jugador blaugrana, por lo menos mientras Ferrán Soriano forme parte de los ‘citizens’, pues desde un inicio dijo que nunca firmaría a un futbolista del Barça. “O va gratis, o no va”, señaló la fuente mencionada,
Añadió que “Luis Suárez, después de todo, parece que aún tiene posibilidades de permanecer como culé, si es que Messi concreta su fuga”.
