El entrenador en jefe de los 49ers, Kyle Shanahan, es claro en la conferencia de prensa después del duelo divisional contra los L.A. Rams y la victoria de su equipo 24-16 el domingo por la noche.
Creo que siempre tuvimos una sensación de urgencia, pero creo que cuando te humillan como la semana pasada, puedes conocer mucho de tu equipo
Esta declaración deja entrever la forma de ver y sentir el fútbol americano por parte de Shanahan. La semana anterior perdieron frente a los Delfines de Miami pero la mejoría de su equipo contra los Rams fue exponencial. Primero era un duelo divisional, segundo se enfrentaban a un equipo con marca de 4 ganados y 1 perdido, demás que la principal preocupación era: ¿cómo frenarían a Aaron Donald?
El equipo mejoró en ambos lados del emparrillado: la defensa limitó en múltiples series ofensivas a Goff, Kupp, Woods, Jefferson, Jackson; obligándolos a series ofensivas con poco tiempo de posesión. Pero lo más llamativo fue el rostro que ofreció la ofensiva de Shanahan. Regresaron a esa identidad que tiene San Francisco corriendo el ovoide (terminaron con 122 en total por tierra)y sobre todo protegió a Garoppolo con método que ni Aaron Donald pudo evitar.
El quarterback de San Francisco se deshacía del balón en 2.38 segundos, así evitaba que lo pudieran tocar; lanzaba a sus jugadores en rutas cortas promediando 4.4 yardas por envío y terminó el partido con 268 yardas.
San Francisco aprendió de los errores cometidos al inicio de la temporada, pero el problema es que la rudeza o complicación de su calendario va a dificultar sus aspiraciones a postemporada siempre y cuando no mejoren partido a partido; si lo consiguen pueden ser contendientes.
Las próximas semanas irán contra Nueva Inglaterra, Seattle, Green Bay y Nueva Orleans por eso decía que si juegan como lo hacían previo al partido de la semana 6 tendrán problemas, si lo hacen como demostraron que lo pueden hacer contra los Rams, “los Niners” solo irán en ascenso.
