Las acciones europeas cerraron estables el lunes tras una sesión de poca actividad en medio del verano boreal y antes de la reunión que tendrá esta semana el Banco Central Europeo sobre política monetaria y de un conjunto de resultados corporativos.
El índice paneuropeo STOXX 600 cerró con un alza marginal de un 0,07%. Apenas 151,5 millones de acciones cambiaron de manos al cierre, lo que se compara con el promedio a 30 días de 1.800 millones.
Sin embargo, un índice de papeles de la zona euroganó un 0,22% por el repunte de las acciones italianas que el viernes se habían hundido a un mínimo de dos meses ante la incertidumbre política en el país.
“Los mercados de acciones han caído levemente en los últimos días, más en Italia que en otros, pero en la mayoría de los casos se mantienen cerca de sus máximos”, dijo Simona Gambarini, economista de Capital Economics.
Los inversores esperan el jueves anuncios del BCE. Los mercados de dinero ven un 50% de probabilidad de un recorte de 10 puntos básicos en las tasas de interés y los inversores en bonos esperan al menos una promesa clara de medidas en septiembre para contrarrestar la desaceleración del crecimiento.
Es probable que la reunión del BCE y el comunicado de emitirá la Reserva Federal la semana próxima determinen si se mantendrá o no la recuperación de las bolsas desde sus pérdidas de mayo.
El STOXX 600 tocó un máximo de sesión tras un reporte del South China Morning Post que dijo que negociadores de comercio estadounidenses podrían ir a China la semana próxima, en el que sería la primera reunión de ambas partes desde su encuentro en el G-20 del mes pasado.