La primera ministra de Finlandia, Sanna Marin, que estaba molesta porque las imágenes de ella bailando en fiestas privadas se publicaron en línea aunque estaban destinados a ser vistos solo por amigos.
Marin, de 36 años, habló después de un video de dos minutos de ella cantando y bailando con conocidos influencers y artistas locales difundido en las redes sociales y en los medios finlandeses ayer miércoles.
La primera ministra de Finlandia, bailando ‘descocadamente ‘. pic.twitter.com/vEeKsiVSJM
— José L. Castañeda (@jlcastanedaj) August 18, 2022
Los clips se publicaron originalmente en una cuenta privada de Instagram. Marin, quien se convirtió en la líder gubernamental en funciones más joven del mundo en diciembre de 2019, dijo que sabía que la estaban filmando, pero nunca pensó que las imágenes estarían disponibles públicamente.
Sanna Marin / Primera Ministra de Finlandia:
Estos videos son privados y se filmaron en un espacio privado. Me molesta que estos se hicieran públicos”.
Ministra Marin molesta por difusión de las imágenes sin su consentimiento
Muchos finlandeses han expresado su apoyo a la joven líder por combinar una vida privada con su carrera de alto perfil. Pero el periódico Helsingin Sanomat dijo que el episodio planteó dudas sobre su juicio.
“Marin pudo haber actuado de buena fe, pero no debería ser así de crédula”, escribió el periódico en un editorial.
“La Primera Ministra puede, en una situación delicada, poner las armas de la guerra de información en manos de aquellos que quisieran lastimar a Finlandia”, dijo el diario.
Marin dijo que las imágenes era una compilación de clips de dos ocasiones distintas hace unas semanas. Ella dijo que las personas en los eventos consumieron alcohol pero nadie tomó drogas que ella supiera.
“Simplemente festejamos, también de una manera bulliciosa. Bailé y canté", dijo Marin, negando la afirmación de que las imágenes habían sido un truco publicitario a menos de un año de las próximas elecciones generales.
Marin dijo en enero a Reuters que ella y sus compañeras jóvenes ministras han sido objeto de un extenso discurso de odio por su género y apariencia mientras estaban en el cargo.
“Es un trabajo muy desafiante. Es algo para lo que no puedes prepararte, pero también es un trabajo que se adapta a un ser humano y quiero decirles a otras personas que cada trabajo es del tamaño de un ser humano, así que también trato de ser yo misma en este trabajo, incluso aunque es muy desafiante, aunque es muy difícil, trato de ser yo misma tomando mis decisiones”, dijo Marin a los reporteros.
