Grupos ecologistas presentaron hoy una nueva demanda para evitar que el gobierno de Donald Trump evada las leyes ambientales y, con ello, acelere la construcción del muro fronterizo en Texas.
El Centro Para la Diversidad Biológica, el grupo Defensores de la Vida Silvestre y el Fondo para la Defensa Legal de los Animales, presentaron la querella contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ante una Corte Federal en Washington.
La demanda se interpone una semana después de que esa dependencia dispensó la aplicación de 28 leyes ambientales para acelerar la construcción de varias secciones del muro fronterizo en terrenos protegidos en Texas, entre ellos un refugio nacional de vida silvestre y un popular centro de mariposas.
Diversos grupos ecologistas han interpuesto demandas para frenar la construcción de tramos de muro fronterizo en California y Nuevo México.
Hasta ahora, ningún juez ha impedido que el DHS avance en la construcción de las estructuras, aunque una Corte Federal de Apelaciones en California esta analizando uno de los casos en esa entidad.
En Texas, el DHS busca construir muros fronterizos en el condado de Hidalgo. Las barreras atravesarían el Refugio Nacional de Vida Silvestre del Valle Bajo del Río Grande (Bravo), el Centro Nacional de Mariposas, el Parque Estatal Bentsen-Río Grande y los terrenos de la histórica Capilla de La Lomita, así como cientos de granjas familiares y propiedades privadas.
El DHS argumenta que se requiere de más muros para detener el flujo de drogas e inmigrantes. La semana pasada, la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, dijo que la construcción es necesaria porque el Valle del Río Grande es un área por donde ingresa ilegalmente un alto número de inmigrantes.
Los grupos ecologistas consideran que el DHS usa erróneamente la autoridad que recibió en 2005 para proyectos específicos y dispense la aplicación de más de dos docenas de leyes, incluidas las de Especies en Peligro de Extinción, la de Agua Limpia y la de Política Ambiental Nacional.
