Londres, Reino Unido.- Los votantes británicos votarían 59-41 a favor de permanecer en la Unión Europea si se les da la opción, una notable variación respecto a la votación del Brexit, según mostró un sondeo de opinión que muestra el mayor respaldo a favor de la pertenencia en la UE de una encuesta de este tipo desde el referéndum de 2016.
En el referéndum del 23 de junio de 2016, 17,4 millones de votantes (el 51,9 por ciento de los votos emitidos), respaldaron la salida de la UE, mientras que 16,1 millones de votantes (el 48,1 por ciento de los votos) respaldaron quedarse. Muchas encuestas de opinión se equivocaron sobre el resultado.
La nueva encuesta mostró que el 59 por ciento de los votantes votaría ahora por permanecer en el bloque, frente al 41 por ciento que votaría a favor de irse. Las conclusiones fueron publicadas en un informe. Se trata del apoyo más alto registrado a favor de la UE en las cinco encuestas de este tipo realizadas desde el referéndum de 2016.
El autor del informe, el experto en sondeos John Curtice, agregó una nota de advertencia, diciendo que un 53 por ciento de los entrevistados dijo que había votado a favor de permanecer en la UE en la votación original, lo que supone una proporción mayor que en la consulta:
“Sin embargo, esto todavía significa que aparentemente ha habido un cambio de seis puntos desde ‘Leave’ (la campaña a favor de salir de la UE) a ‘Remain’ (la opción de quedarse), mayor que el registrado en cualquiera de nuestras rondas previas de entrevistas, y una cifra que aparentemente apunta a un voto de 54 por ciento (a favor de quedarse) en cualquier segundo referéndum que se celebrase ahora”, dijo Curtice en el informe.
Está previsto que Reino Unido salga de la UE el 29 de marzo de 2019, pero aún debe llegarse a un acuerdo de salida que defina las relaciones futuras con Bruselas y gestione el impacto económico de terminar más de cuatro décadas de integración con el mayor bloque comercial del mundo. El Gobierno ha descartado celebrar un segundo referéndum.
La encuesta entrevistó a 2.048 personas entre el 7 de junio y el 8 de julio, lo que implica que la encuesta no refleja completamente los posibles cambios de opinión provocados por la publicación de la estrategia de negociación de la primera ministra Theresa May, conocida a principios de julio.
Esa estrategia de negociación ha dividido al partido de May y ha recibido duras críticas tanto de los partidarios del Brexit como de aquellos que desean mantener estrechos vínculos con la UE. Sin embargo, la encuesta muestra que los votantes pensaban que las negociaciones estaban yendo mal incluso antes de la publicación del llamado plan de Chequers de May.
“Tanto los partidarios de quedarse como los que prefieren salir se han vuelto notablemente más críticos sobre cómo han gestionado las negociaciones el Gobierno del Reino Unido, especialmente, y, algo menos, la UE”, dijo Curtice. “También se han vuelto marcadamente más pesimistas sobre las bondades que tendrá el acuerdo para Reino Unido”.
