Este jueves, fiscales del norte de Mexico interrogaban a 17 efectivos de la Guardia Nacional, una policía militarizada, quienes se vieron envueltos en un tiroteo en el que murió una mujer, mientras que su esposo resultó herido, dijeron autoridades a la par de que crecían las tensiones por una protesta en defensa del agua.
La Guardia Nacional dijo en la víspera que dos personas murieron luego de que sus efectivos “repelieron la agresión” de civiles armados en Delicias, en el estado Chihuahua, tras violentas manifestaciones en la cercana presa La Boquilla, donde se desvía agua a Estados Unidos.
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Pero autoridades corrigieron este jueves que una de las víctimas, un hombre, en realidad sobrevivió y permanece hospitalizado de gravedad, pues el día de ayer se había mencionado que también perdió la vida.
“Lamento mucho que haya perdido la vida una mujer, que su esposo incluso esté grave”, dijo el presidente, Andrés Manuel López Obrador, en su conferencia de prensa matutina.
“Hay varios señalamientos que involucran a elementos de la Guardia Nacional en este hecho”, aseguró en un comunicado el fiscal estatal, César Peniche, al anunciar que se va a “establecer la secuencia de lo sucedido y determinar el grado de participación de quién o quiénes resulten responsables”.
Antonio Soto, portavoz de la Guardia Nacional, comentó a Reuters que 17 agentes están “colaborando” con la investigación y “acudirán a rendir su declaración (...) cuando sean requeridos por la autoridad”.
De esta forma, el asunto de la investigación todavía se encuentra en curso, por lo que los señalamientos hacia los elementos de la Guardia Nacional todavía son considerados como supuestos y no acusaciones directas.
Agricultores de la zona mantienen protestas contra un plan para desviar una mayor cantidad de agua a Estados Unidos, como parte del tratado bilateral de 1944 que regula el intercambio del líquido entre los dos países vecinos.
El gobernador de Chihuahua, Javier Corral, dijo que las víctimas, una pareja identificada por medios locales como Jessica Silva y Jaime Torres, participaron en las protestas del miércoles en La Boquilla y se toparon luego en la noche con la Guardia Nacional, camino a Delicias.
Justina Zamarripa, madre de la fallecida, dijo a Reuters que su hija y su yerno eran “gente de paz”, pidió justicia y explicó que en la zona protestan para reclamar lo que es suyo. “Lo único que nosotros estamos peleando es (por) lo que nos pertenece, el agua, para nosotros agricultores, porque todo se está secando”.
Grupos de derechos humanos han cuestionado al gobierno de México por incluir a militares en la Guardia Nacional y darle más facultades que a la disuelta Policía Federal, a la que sustituyó, mientras organismos como la ONU piden además retirar de las calles al Ejército que, por años, ha sido acusado de cometer graves abusos a los derechos humanos.
En seguimiento a los hechos sucedidos en #Chihuahua, se informa que la #GuardiaNacional ha mantenido una cooperación estrecha con la @Fiscalia_Chih y la delegación de la @FGRMexico , a efecto de aportar los elementos necesarios para el esclarecimiento de los hechos.
— Guardia Nacional (@GN_MEXICO_) September 10, 2020
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