Jay Y. Lee, heredero y vicepresidente de Samsung Electronics, volverá a prisión luego de que fuera condenado a dos años y medio en la cárcel, por el delito de soborno.
Lee, considerado como el hombre de negocios más poderoso de Corea del Sur, ya había estado preso un año, por sobornar al ex presidente Park Geun-hye. El Tribunal de Apelaciones suspendió el encarcelamiento en 2018, pero un año después, el Tribunal Supremo ordenó un nuevo juicio. El tiempo que estuvo preso anteriormente contará para este nuevo proceso.
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La nueva sentencia puede apelarse, pero expertos vislumbran lejana esa posibilidad, pues una vez que la sentencia fue dictada, es difícil que la decisión sea revocada.
Autoridades de Seúl acusaron a Lee de soborno, malversación de fondos y ocultar ingresos delictivos por valor de 8 mil 600 millones de wones (7.8 millones de dólares).
La sentencia llega en un momento importante para Lee, pues deberá alejarse de todas las decisiones importantes de Samsung Electronics, justo cuando se realiza una transición a una nueva era, tras la muerte de su padre, Lee Kun-hee, en octubre pasado. Esta nueva reestructura podría dejarlo al margen de la emrpesa.
El caso de Lee y Samsung forma parte de los ahora conocidos sobornos de propietarios de emrpesas poderosas al gobierno tras la guerra de Corea.
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