El índice S&P 500 de la Bolsa de Valores de Nueva York cerró el jueves en máximos históricos, ya que los rendimientos del Tesoro estadounidense cayeron tras datos del mercado laboral más débiles de lo previsto, lo que impulsó a los valores tecnológicos y otros de crecimiento.
Los datos semanales sobre las solicitudes iniciales de subsidio de desempleo mostraron un segundo aumento consecutivo, que contradijo un reciente informe sobre las nóminas y reforzó la postura de política monetaria de la Reserva Federal de mantener las tasas de interés bajas durante un largo tiempo.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, señaló el jueves que el banco central no está cerca de reducir el apoyo a la economía estadounidense, y dijo que el aumento de precios previsto para este año probablemente sea temporal.
Los datos más débiles ayudaron a que los rendimientos dela nota del Tesoro estadounidense de referencia a 10 años cayeran hasta un 1.624%, su menor nivel desde el 26 de marzo, mientras se sigue alejando de un máximo de 14 meses del 1.776% de finales de marzo.
“Wall Street premia el crecimiento, lo que no significa que las acciones de valor nunca vayan a subir, sino que lo harán porque tienen mejores perspectivas de crecimiento que sus vecinos, y en eso se basa todo esto”, dijo Kim Forrest, director de inversiones de Bokeh Capital Partners.
“Fue un poco ridículo que los rendimientos de los bonos precedieran a una inflación galopante. No fue así, así que la tecnología vive otro día”, agregó. El Promedio Industrial Dow Jones subió 57.31puntos, o un 0.17%, a 33,503.57 unidades, mientras que el S&P500 ganó 17.22 puntos, o un 0.42%, a 4,097.17 unidades. El Nasdaq sumó 140.47 puntos, o un 1.03%, a 13,829.31unidades.
El reciente retroceso de los rendimientos ha ayudado a las empresas de alto crecimiento, como las de tecnología, el sector que registró la mayor subida de la sesión. Las acciones de megacapitalización como Apple, Microsoft y Amazon fueron las que más impulsaron al S&P500. Las ganancias hicieron que el Nasdaq, de gran peso tecnológico, alcanzara un máximo de siete semanas y se situara a un 2% de su récord de cierre del 12 de febrero.
