Tras la pandemia por COVID-19, no solo las finanzas de algunas empresas se han visto afectadas, sino también los bolsillos de las familias, pues de acuerdo con algunas denuncias los precios de diversos productos se han elevado de manera dramática, por ejemplo, el pollo.
El promedio nacional de precio de esta ave pasó de 108 a 116 pesos por kilo; sin embargo, habitantes de la Ciudad de México han reportado que, en algunas zonas, el pollo sin hueso, uno de los alimentos más consumidos por los mexicanos, rebasa los 140 pesos por kilo.
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De acuerdo con el diario La Jornada, la propia Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) informó que el precio promedio se mantuvo en 109 pesos desde junio del año pasado hasta mayo de este 2020, cuando se disparó hasta 114 pesos y para junio llegó a 116 pesos.
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En la Ciudad de México, el precio promedio de la pechuga de pollo sin hueso se ubica en un promedio de 119 pesos el kilo, según la Profeco.
En tanto, el diputado local por el PAN, Héctor Barrera, aseguró haber recibido denuncias vecinales por dicho incremento, las cuales dijo haber transmitido al titular de la Profeco, Ricardo Sheffield Padilla, a fin de verificar los precios de este producto en los mercados de la ciudad.
De acuerdo con el legislador, miembros de su equipo confirmaron el aumento de precios, no solo del pollo, sino también de otros productos como el aguacate, en 80 pesos; el plátano, en 45 pesos, y el kilo de frijol, que ya asciende a 60 pesos.
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