Cd. de México.- Autoridades de la Secretaría de Salud reiteraron que no comprarán ni recomendarán el uso de pruebas rápidas para la detección de COVID-19, esto a pesar de que la Cofepris autorizó 10 licencias sanitarias para su elaboración.
Consideraron que dichas pruebas rápidas pueden representar un riesgo para la salud de la población.
Esta conclusión fue tomada debido a que sostuvieron reuniones con expertos nacionales e internaciones analizaron la viabilidad y efectividad de las pruebas y coincidieron en que estas no son confiables.
En cuanto a los casos acumulados en todo el país la cifra llegó 105 mil 680 casos acumulados, entre ellos hay 18 mil 377 casos activos. Se han presentado 46 mil 659 sospechosos acumulados y 161 mil 724 negativos acumulados. Se han registrado 12 mil 545 defunciones.
