Un bebé de tan solo 18 meses fue encerrado en una jaula, espacio donde sus propios padres lo mantenían; a su alrededor, el pequeño convivía con 600 animales y plantas de marihuana.
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Los lamentables hechos ocurrieron en el estado de Tennesse, Estados Unidos, en el condado de Henry; la policía local acudió al domicilio después de que se recibiera un reporte.
En cuanto los oficiales llegaron, descubrieron que el pequeño se encontraba enjaulado y en condiciones poco saludables; incluso, se señaló que el bebé de tan sólo año y medio no tenía con que abrigarse.
Monte Belew, el sheriff del condado, comentó que, al mirar la puerta principal, pudo ver al niño en una perrera. Obviamente, por el aspecto que la jaula tenía, aseguraba que el niño había pasado ahí mucho tiempo.
El sheriff identificó a los padres del menor como T.J. Brown, de 46 años, y Heather Scarbrough, de 42 años, así como el abuelo, Charles Brown, de 82 años. Los tres fueron detenidos y acusados de abuso agravado contra menores, crueldad animal, fabricación de marihuana y posesión de objetos para la elaboración de sustancias nocivas a la salud.
De acuerdo con el reporte que se emitió, el pequeño se encontraba en un estado de desnutrición y convivía con: 8 serpientes, 531 roedores (ratas, ratones y hámsters), 10 conejos, 86 gallinas y gallos, 56 perros, 4 pericos, 3 gatos, 3 petauros, 1 ave faisán, 1 lagarto y 1 gecko.
También le fueron confiscadas a la familia alrededor de 130 plantas de marihuana y 17 armas de fuego. El lugar estaba infestado de cucarachas y gusanos. El bebé se encontraba cerca de una boa y heces de otros animales.
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Belew aseguró que, con todos los años que lleva en el servicio, es difícil encontrarse con algo que los sorprenda pero que, sin duda, esto superó todo lo que alguna vez vio.
