Ciudad de México. El 2 de octubre fue un crimen de Estado y hoy tiene amplia vigencia el pliego petitorio de los jóvenes de aquella generación, aseguraron legisladores de izquierda desde la Tribuna del Congreso de la Ciudad de México.
A 50 años de la matanza estudiantil de 1968, el Congreso local realizó una sesión solemne en conmemoración de las víctimas.
El coordinador de los diputados de Morena, Alejandro Encinas, pidió reconocer que el viejo régimen sigue vivo, por ello no se puede olvidar la historia, para no condenarnos a repetirla:
“Debemos señalar y reconocer que si bien la izquierda y las fuerzas progresistas ganamos las elecciones con un amplio y legítimo margen y que se ha construido una nueva mayoría, el viejo régimen sigue vivo, nos encontramos en un momento en el que el viejo régimen no acaba de morir y lo nuevo está por construirse y que sin lugar a dudas esa construcción de lo nuevo enfrentará muchas resistencias…”, señaló desde Tribuna.
Aseguró que el pasado triunfo de la izquierda, “encuentra sus raíces en el movimiento estudiantil de 1968” y explicó por qué considera que el pliego petitorio de los estudiantes del 68 tiene una gran vigencia:
“las demandas de diálogo público, ante la sordera de un gobierno que afortunadamente ya se va; la libertad de presos políticos como los muchos que hay por defender los recursos naturales y los derechos humanos en las cárceles del país, la derogación del delito de disolución social como hoy demandamos la abrogación de la ley de seguridad interior; la desaparición del cuerpo de granaderos, como hoy condenamos las agresiones de policías estatales y municipales, las profundas violaciones a los derechos humanos por las fuerzas armadas, el respeto a los derechos y libertades, la indemnización a los afectados por la represión del 68 se extiende a decenas de miles de víctimas dela violencia resultado de la mal llamada guerra contra la delincuencia organizada…”
Remató su discurso con la frase: “¡Nunca más un 2 de octubre, nunca más estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa!”
En su oportunidad, el diputado del PT Jesús Martín del Campo, ex líder de este movimiento estudiantil, aseguró que esta masacre de estudiantes comenzó a escribir “el epitafio del viejo régimen autoritario y criminal” y recordó también la masacre del 10 de junio de 1971:
“El mátalos en caliente del Porfiriato, se convirtió en Operación Galeana, que así se llamó, para asesinar a estudiantes con la frialdad con que se perpetra un crimen largamente planeado, un crimen de Estado, Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría fueron los responsables de su diseño y organización”, aseveró
Los dirigentes de izquierda, hoy diputados coincidieron en que los ecos de aquella generación han reaparecido en los últimos años con movimiento de jóvenes como el “Yo Soy 132”, el movimiento de los normalistas rurales y las recientes protestas de los universitarios contra el porrismo en las escuelas.
A esta sesión solemne que inició con un minuto de silencio, acudieron como Invitados Especiales, representantes de distintas escuelas que participaron en este movimiento, a quienes desde tribuna les reconocieron el espíritu englobado en la frase: “seamos realistas, alcancemos lo imposible”.
