Ciudad de México a 7 de octubre de 2019. Según la Organización Mundial de la Salud, las caídas son la consecuencia de cualquier acontecimiento que precipite una persona al suelo en contra de su voluntad, puede ser referida por el paciente o por un testigo.
Especialistas de la UNAM explican que las caídas forman uno de los síndromes geriátricos con mayor incidencia y elevada morbilidad, por tanto, es considerado un problema de salud pública importante que afecta la calidad de vida de adultos mayores.
Para diagnosticar el llamado “Síndrome de Caídas” en el adulto mayor deben de cumplirse las siguientes características, toma nota:
-Dos o más caídas en los últimos 12 meses, o bien, 1 caída que haya requerido hospitalización o causado alguna secuela.
Hay que decir que de acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a nivel mundial las caídas son la segunda causa de muerte por lesiones accidentales o no intencionales. Se calcula que anualmente mueren en todo el mundo unas 646 mil personas debido a caídas, y más del 80% de estas caídas se registran en países de bajos y medianos ingresos, siendo los adultos mayores de 65 años quienes sufren más caídas mortales.
Aproximadamente un 30% de los adultos mayores de 65 años que vive en comunidad cae al menos 1 vez al año, es decir, una relación en la que, por cada 3 adultos mayores uno caerá. De estos, el 50% volverá a sufrir una nueva caída, mostrando a su vez un incremento progresivo de las caídas al aumentar la edad. La prevalencia de las caídas varía en función de la edad, su fragilidad y el entorno.
El lugar donde se presentan las caídas con más frecuencia son en:
-Casa con un 62% de incidencia. Dentro de la casa, los espacios que tiene mayor riesgo son: el baño, la recamara, el patio y las escaleras.
-Vía pública un 26%.
Los especialistas dicen que algunas de las cuasas de las caídas son el consumo de 3 o más fármacos (polifarmacia), alteraciones visuales o auditivas, fragilidad, demencia y la incontinencia urinaria.
Además explican que también pueden darse consecuencias tardías como el síndrome post-caída (miedo a volver a caer), depresión, aislamiento social, limitación y/o dependencia en las actividades de la vida diaria, que puede provocar síndrome de dismovilidad y muerte.
La recomendación de los especialistas, como la pasante de la Licenciatura de Fisioterapiade la UNAM, Karen Puebla Rosas, es prevenir las caídas sin limitar el movimiento, la independencia y por tanto las actividades de la vida diaria, es por ello que se requiere de un trabajo multidisciplinario que cubra las cuatro esferas de la evaluación geriátrica integral; clínicas, funcionales, mentales y sociales.
