Ya comenzó la temporada de incendios forestales y es importante identificar los principales factores de riesgo que los propician.
De acuerdo con Víctor Magaña Rueda, investigador del Instituto de Geografía de la UNAM, no brotan espontáneamente sino que son consecuencia de un mal manejo del fuego y de los recursos naturales. En otras palabras, son resultado de la combinación de una amenaza (natural) y una vulnerabilidad (socialmente construida, más no un desastre natural.
En un texto publicado por la máxima casa de estudios, el especialista detalla que “los incendios forestales son un gran problema ambiental en México y el mundo, y aumentan cuando disminuye la precipitación y aumenta la temperatura.
“Para evitarlos es necesario eliminar las quemas agrícolas (como la agricultura de roza, tumba y quema), así como diseñar y aplicar políticas públicas de prevención”.
Algunos de los factores que causan un incendio, como los de Australia, existen factores como sequía meteorológica, altas temperaturas, baja humedad del aire, vientos intensos y descargas eléctricas y, condiciones de vulnerabilidad como actividades humanas que utilizan fuego, y vegetación dominante con propensión a incendiarse.
Respecto al mismo tema, puntualizó que Australia pasó por un año de sequía, por lo cual desde octubre y hasta la fecha continúan los incendios. Incluso, la llegó a calificar como la “peor sequía meteorológica en más de un siglo”.
En el caso de México, Magaña Rueda mencionó que “factores naturales como la sequía meteorológica, las altas temperaturas y el estrés hídrico de la vegetación esclarecen en parte los incendios forestales, pero no se puede explicar su número y afectación sin tomar en cuenta la actividad humana”.
