Ciudad de México.- De las 28 personas detenidas durante un cateo en un centro nocturno en avenida Insurgentes Sur, la Procuraduría de Justicia capitalina ejerció acción penal en contra de cinco.
Los imputados son acusados del delito de trata en su modalidad de explotación sexual y son empleados del bar ubicado en la colonia Chimalistac, delegación Álvaro Obregón, informó Juana Camila Rebollar, titular de la fiscalía.
Según las primeras investigaciones, las mujeres que trabajaban ahí tenían que firmar un contrato que deslindaba a la empresa de sus actividades sexuales.
La madrugada del jueves, la Fiscalía Antitrata cumplimentó una orden de cateo, otorgada por un juez de control, en contra del “Bar Curazao”. El agente del ministerio público fue acompañado por Policía de Investigación y elementos de la Policía Federal.
Rebollar destacó que cinco de las víctimas declararon que no estaban de acuerdo en que los inculpados obtuvieran beneficios económicos del trabajo que realizan, además de que una mujer fue sorprendida en flagrancia cuando tenía relaciones sexuales con un cliente.
“Tras la denuncia, las mujeres identificaron al administrador del bar y al capitán de meseros como las personas que, además de promoverlas, se quedaban con la mayor parte de las ganancias.
“También señalaron a uno de los meseros como el que presuntamente las promovía y aleccionaba en caso de que hubiera algún operativo; a la boletera, quien supuestamente las promovía y a un hombre de 51 años que utilizaba varios nombres, como el que las dirigía”, informó en conferencia de medios.
En las próximas horas se llevará a cabo la audiencia inicial en el Reclusorio Sur donde solicitarán a un juez de control que califique de legal la detención, los vincule a proceso y les imponga la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa.
