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Ahí le van algunos datos que tal vez no conocía:
El uso de la bicicleta se disparó en 250 por ciento durante la pandemia de COVID-19, esto según datos de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad, y no es raro, es un medio de transporte individual y al aire libre; lo que evita aglomeraciones y contacto con otras personas.
Sin embargo, también durante la pandemia, el número de accidentes en bicicleta se ha incrementado hasta en 120 por ciento. El número de lesiones y discapacidades por accidentes víales también ha llegado a niveles alarmantemente altos.
Para muchos la bicicleta y otros medios de transporte alternos son la solución de embotellamientos, contaminación e incluso obesidad, sin embargo para que esto sea una realidad, al menos en ciudades como CDMX, hace falta mucho.
Se ha contabilizado un importante incremento en el número de kilómetros de ciclovías, sin embargo estos carriles confinados se han insertado en otras vialidades y en zonas que no estaban pensadas para ello por lo que muchas de estas arterías y rutas son un verdadero reto para los ciclistas y peatones.
A los retos de la convivencia entre ciclistas, automovilistas y peatones hay que sumarle la inseguridad, las grandes distancias que hay que recorrer, la falta de un transporte público eficiente y suficiente y, por supuesto, la educación víal de todos.
Para unos puede ser una moda pero para muchos, la bicicleta es el unico transporte. Se estima que 2 millones 196 mil personas utlizan la bicicleta como medio de traslado y para más de 488 mil personas es la única forma de acudir a la escuela.
De todo esto conversaron Laura Barrera, Directora de Intraffic México, y Juan Carlos Barajas en el episodio de hoy de “Cortando La Baraja”.
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