Ante la falta de regulación en las pruebas rápidas COVID-19 que se encuentran en las calles de la ciudad hasta en puestos ambulantes desde $130 pesos, se necesita una ley regulatoria para este tipo de “mercado negro” que acecha en diferentes establecimientos, si bien esta necesidad de vigilancia sanitaria se presentó desde que inicio la pandemia ahora la alerta creció a nivel internacional, ya que otros medios dieron a conocer el reciente caso de estudiantes argentinos infectados por el virus en Cancún, donde medios y autoridades del país del sur hicieron un llamado ante “mercado negro de pruebas falsas en México” y dieron a conocer que 44 turistas que venían de Cancún dieron positivo en las pruebas rápidas COVID 19 en el aeropuerto internacional de Buenos Aires.
Sin embargo lo que apuntó a un fraude a gran escala de pruebas apócrifas en nuestro país fue que algunos de los estudiantes antes de retornar a su país de procedencia se realizaron una prueba en el laboratorio Marbu Salud en Cancún, donde varios de ellos salieron negativos a la prueba aun cuando ya iban con síntomas, sin embargo, llegando a su país se hicieron otro reactivo donde salieron positivos a SARS-COV-2 hecho que alertaba sobre supuestos exámenes falsos.
Posteriormente otros medios dieron a conocer que el Gobierno de Quintana Roo tomo medidas en el asunto clausurando el laboratorio Marbu Salud que estaba operando y ofreciendo pruebas con falsos negativos a empresas y público en general, ya que no estaban avalados por el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos.
Al respecto El Consejo Mexicano de Empresas de Diagnóstico Médico (Comed) hizo un llamado a la COFEPRIS para identificar a los establecimientos y sancionarlos. Guillermo Máynez Gil, director general del Comed comenta que “existe tecnología blockchain con la que solo basta escanear un único código QR y así se accede a los datos clínicos sin incluir ningún dato personal; tras ingresar el código, se sabrá si la persona en efecto dio negativo o positivo a la prueba Covid-19” aseguro.
Por lo que se espera que se tomen medidas más severas ante el riesgo sanitario que esto representa por la falta de vigilancia y análisis de los centros que siguen aprovechándose de la necesidad de la gente ante una prueba, misma que debería ser responsabilidad de pacientes investigar los establecimientos médicos y laboratorios a donde acuden y saber si están certificados para realizar dichas pruebas de virus.
