Beijing.- Las ventas de automóviles de China se hundieron un 11,6 por ciento en septiembre, su peor caída mensual en casi siete años, debido a que la desaceleración del crecimiento económico y la profundización de la guerra comercial con Estados Unidos afectaron al mercado automotor más grande del mundo.
La Asociación China de Fabricantes de Automóviles (CAAM por su sigla en inglés) dijo el viernes que las ventas de vehículos cayeron por tercer mes consecutivo en septiembre, a 2,39 millones de unidades, debido a la ralentización de la economía, el desapalancamiento y la lucha contra la polución.
El principal organismo de la industria automotriz de China también señaló que no se alcanzaría el ya exiguo pronóstico de crecimiento para todo el año, aunque el sector lograría evitar una caída en las ventas. Analistas han dicho que el mercado podría contraerse este año por primera vez en décadas.
La tendencia bajista en las ventas subraya que los fabricantes internacionales de automóviles, desde General Motors hasta Toyota Motor, se encuentran en un difícil momento al apuntar cada vez más a China como motor de expansión.
Además ejemplifica el impacto de la guerra comercial entre China y Estados Unidos, ya que los autos se encuentran entre los sectores más afectados por los aranceles. CAAM dijo que las ventas del mes pasado se vieron afectadas por esa disputa.
La caída de septiembre fue la mayor desde un desplome del 26,4 por ciento en enero de 2012, que se debió en parte a efectos del calendario de los feriados de Año Nuevo de China ese año.
Xu Haidong, secretario general adjunto de la CAAM, dijo en una sesión informativa que el crecimiento de las ventas en 2018 no alcanzaría el pronóstico de la asociación de un alza del 3 por ciento. Las ventas aumentaron un 3 por ciento el año pasado, muy por debajo del aumento del 13,7 por ciento anotado en 2016.
