7 de abril.- Asma Azis se negó a bailar para su marido y fue desnudada, rapada y golpeada por los amigos del hombre con el que contrajo matrimonio hace un año, lo cual desencadenó una ola de indignación por violencia doméstica entre las organizaciones protectoras de derechos humanos.
“Me quitó la ropa delante de sus sirvientes. Los sirvientes me sujetaron mientras me afeitaba el pelo y lo quemaba. Mi ropa estaba ensangrentada. Estaba atada a una tubería y colgada del ventilador.
Luego de que el caso se diera a conocer a nivel mundial, Amnistía Internacional publicó en su cuenta de Twitter que “es necesario un cambio sistemático ante el creciente número de denuncias de violencia de género”.
Adicionalmente señalaron que se ha observado un “alarmante aumento de casos de violencia contra mujeres en todo el mundo, por lo que las acciones ya no pueden ser tomadas caso por caso”.