Los asteroides cercanos a la Tierra generalmente se detectan mucho antes de su aproximación más cercana a nuestro planeta. Eso se debe a que las agencias espaciales y los científicos de todo el mundo buscan regularmente rocas potencialmente peligrosas que podrían representar un problema para nosotros en el futuro.
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El asteroide, que se estima que tiene hasta 5 metros y medio de ancho, suena bastante pequeño. Su descubrimiento fue tuiteado por primera vez por el astrónomo Tony Dunn, quien incluyó una breve simulación que muestra el sobrevuelo de la roca espacial de nuestro planeta.
Es fácil ver el número y pensar que estaba extremadamente lejos de la Tierra, pero considerando que la Luna está, en promedio, a 384 mil 633 kilómetros de la Tierra, se puede comprender por qué los científicos se sorprendieron con la aparición del 2020 QG.
Vale la pena señalar que, incluso si el asteroide estuviera en el extremo superior de las estimaciones de tamaño, no se consideraría un peligro. Con toda probabilidad, el asteroide se habría roto en cuanto impactara la atmósfera de la Tierra, y sólo muy poco de su material hubiera llegado a la superficie.
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Paul Chodas, del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA, señaló que el grupo “no lo veía venir”. Además, dijo que el evento fue definitivamente un récord, al menos en lo que respecta a la NASA, ya que se registró como el acercamiento más cercano.