Parece que de nuevo el futuro llegó más rápido a Singapur, donde ya existen máquinas expendedoras de cubrebocas reutilizables que cuentan con tres capas de tela especial para impedir el paso de patógenos como el Covid-19.
Dichas máquinas funcionan igual que las de refresco o alimentos chatarra y tiene como propósito que el cubrebocas sea más accesible para los habitantes a cualquier hora del día.
People’s Association, a cargo del ministerio de Cultura, fue el responsable de su instalación. Además añade dos características: pueden ser lavados hasta en 30 ocasiones y tienen esparcido antibacterial.
“Nuevos materiales han sido usados en estas máscaras para mejorar su resistencia, además impiden el paso de gotículas (factor infectante) mientras son cómodas para los usuarios”, explicó la People’s Association.
Para su adquisición es necesario tener una tarjeta de identificación especial en lugar de monedas o billetes que la gente suele vertir en estas máquinas, esto como medida para que cada ciudadano tenga oportunidad de obtener una.