Ciudad de México. A pregunta de la prensa, el presidente rechazó abrir un diálogo con los grandes capos de la delincuencia organizada en un intento de pacificar el país.
“No se está planteando eso. Lo que se quiere es que no tengan base social, que se vayan quedando solos, si van a mejorar las condiciones de vida y las condiciones de trabajo. ¿Por qué se llegaron a estos extremo? Porque se abandonó al pueblo”, expresó.
El presidente dijo que en su administración no hay intereses creados, por lo que no habrá límites ni obstáculos para dar justicia ante los casos como el del operativo en Culiacán, pero especialmente en el asesinato de la familia LeBarón, donde se perdieron vidas de niños y mujeres.
“Estamos trabajando para esclarecer los hechos y que haya justicia. No hay ningún límite ningún obstáculo no impida que se haga una investigación a fondo porque no hay intereses creados de por medio. Esa ventaja nos ayuda”, abundó.
Aseguró que México cuenta con instituciones, la capacidad y la instrumentación para enfrentar a crimen organizado, por lo que no se volverá a la guerra contra el crimen organizado.
Minimiza críticas de legisladores estadounidenses a su estrategia de seguridad
Además, ante las recientes críticas de senadores estadounidenses por la violencia que se viven en México, el presidente López Obrador dijo que será respetuoso de todas las opiniones, pero recalcó que no las comparte.
“Sin balandronadas, sólo recordar que somos un país libre, independiente y soberano (…) No queremos que injerencismo de ningún gobierno extranjero”, expresó.
Empero, destacó la actitud respetuosa del gobierno presidente Donald Trump en torno al caso Culiacán y el de la familia LeBarón.
El presidente subrayó que no dejará que se ‘amarren navajas’ con el gobierno estadounidense.
“Va a haber quienes quieran buscar que nos confrontemos. No lo van a lograr. Para que haya pleitos se necesitan por lo menos dos; uno no puede pelearse o buscar pleito”.