20 de abril.- Los bebés de cero a dos años no deben asolearse aun cuando tengan protección solar, ya que su piel es inmadura y no ha desarrollado las defensas necesarias, por lo que corren riesgo al exponerse a los químicos de filtros y protectores solares.
De igual forma, aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de piel a edades tempranas, aseveró Lorena Guadalupe Estrada, jefa de Dermatología del Hospital Regional, “Lic. Adolfo López Mateos”, del ISSSTE. Esta misma restricción es para las personas que padecen o tuvieron cualquier tipo de cáncer de piel, ya que al asolearse el riesgo de que la enfermedad se agrave o se vuelva a desarrollar es muy alto.
En la playa o albercas se recomienda utilizar filtros solares resistentes al agua y aplicar cada dos horas; retocar el filtro cada vez que salgan del agua y se vuelvan a meter.
En un comunicado de la institución, la especialista indicó que el sol tiene muchos beneficios como estimular la producción de vitamina D en el cuerpo humano, necesaria para mantener los huesos sanos, pero asolearse en exceso puede traer consecuencias irreversibles como el envejecimiento prematuro de la piel y el riesgo de cáncer de piel.
Refirió que la temporada de marzo a septiembre es el periodo de mayor radiación ultravioleta, y recordó que80% de la radiación solar que recibe el cuerpo se adquiere antes de los 18 años, de ahí la importancia de sensibilizar a la población para no sobreexponerse.