México, 13 de febrero.- El director administrativo del Hospital Veterinario UNAM Banfield, Adrián Rodríguez-Granada, destacó que por sus características físicas, los cachorros caninos y felinos son un regalo frecuente el Día del Amor y la Amistad, pero esto implica ponerlos en peligro de abandono o maltrato.
Dijo que aunque la opción de regalar un cachorro (perro o gato) sigue siendo una posibilidad muy atractiva, desgraciadamente estos animales son obsequios “sorpresa” que no siempre son bien recibidos.
Rodríguez-Granada reconoció que al igual que pasa con los regalos de Navidad y Día de Reyes, la mayoría de los ejemplares otorgados en el Día de San Valentín terminarán abandonados en la calle y sin familia, algunos meses después.
“Hay que tomar en cuenta que antes de incorporar una mascota a un núcleo familiar, se debe realizar una visita al médico veterinario y tener una conversación extensa para que el especialista pueda orientar al futuro dueño sobre cuál es el animal más adecuado para las capacidades económicas, sociales y de tiempos disponibles”, indicó.
Cuando esto no sucede así, el riesgo es grande pues quizá quien recibe esta “sorpresa” no tiene clara la responsabilidad y el compromiso que significa una vida más a su cargo o simplemente no quiere hacerse cargo de las tareas que implica tener una mascota en casa.
Desafortunadamente, cuando llega la mascota a casa, y no fue una decisión consensuada con todos los miembros de la familia puede haber problemas, por lo que muchos perros y gatos pueden terminar en la calle sin ser esterilizados.
En varios estados del país existen leyes que protegen a los animales para garantizarles bienestar, atención, un buen trato, manutención, alojamiento, salud y evitar que puedan ser objeto de crueldad, explotación y sufrimiento.