Un policía utilizó la maniobra de Heimlich para salvarle la vida a un abuelito que se estaba ahogando en un restaurante en el centro de Turquía. El momento quedó grabado en las cámaras de seguridad del lugar.
En las imágenes se pudo ver al abuelito que comía acompañado de otro hombre en un restaurante en el pueblo de Sungurlu, en la ciudad de Corum, Turquía.
De pronto, el abuelito comenzó a ahogarse con un alimento y no podía respirar debido a que tenía un pedazo de comida atorado en la tráquea. El hombre muy discreto empezó a toser, su compañero le ofreció un vaso de agua, pero el señor le hizo señas para que lo golpee en la espalda.
Su amigo trató de ayudarlo, pero no lo consiguió. Al lado de ellos, había tres policías comiendo que no se habían dado cuenta de lo que pasaba. El resto de los comensales notaron que el abuelito estaba en problemas y se acercaron.
Hasta entonces, los oficiales notaron lo que pasaba y uno de ellos se acercó a auxiliar. El oficial Bunyamin Temiz corrió para auxiliar al abuelito aplicando la maniobra de Heimlich hasta que el hombre expulsó el pedazo de alimento que lo asfixiaba.
¿Cómo se aplica la maniobra de Heimlich?
La persona que hará la maniobra de Heimlich debe colocarse, de pie, detrás de la víctima, para rodearla con los brazos a la altura de la cintura.
Después, con una de las manos se debe localizar el ombligo y dos dedos por arriba de éste poner el puño de la mano, “procurando que el dedo gordo quede sobre la línea media del abdomen, por arriba del ombligo”.
Las compresiones de la maniobra de Heimlich deben repetirse hasta que la persona afectada tosa, lo cual le permitirá arrojar el objeto que provocó el atragantamiento, indicó la dependencia.