Un mensaje de prevención para todos los mexicanos

Aprende a decir ¡NO! a manejar bajo la influencia del Alcohol.

Conducir un vehículo bajo la influencia del alcohol (aún en cantidades pequeñas) aumenta el riesgo de sufrir un accidente.

¡Está comprobado científicamente!

Consumir alcohol, aunque sea a muy bajas dosis; distorsiona la visión, afecta nuestros reflejos y disminuye el discernimiento de quien lo consume. Ahora imagina sufrir esos efectos detrás de un volante!

¡Los resultados pueden ser trágicos!

De acuerdo con la tasa internacional de alcoholemia, existe una zona de riesgo llamada: “intoxicación ligera” que equivale a 0.5 g/l de alcohol en sangre, donde algunos síntomas clínicos son: Alteraciones en la toma de decisiones, disminución de la atención, subestimación de la velocidad, excitabilidad, desinhibiciones y problemas de coordinación motora y psicomotora.

Si una persona llega a presentar una sobrevaloración de capacidades, pérdida del autocontrol, inestabilidad emocional, entre otros síntomas clínicos, es seguramente porque su estado ha pasado a uno de “embriaguez y excitación” mejor conocido como “zona de peligro” con .9 – 1.5 g/lde alcohol en sangre. Lo que evidentemente agrava la posibilidad de presentar algún accidente tanto del conductor, como de sus acompañantes y/o terceras personas.

Según datos de especialistas en el tema, en México los días jueves, viernes y sábado por la noche, se movilizan alrededor de 200 mil conductores bajo influencia del alcohol. Por este motivo mueren al año aproximadamente 24 mil personas en accidentes automovilísticos
relacionados con el consumo de alcohol, situándolo en la 7ª posición a nivel mundial”, de acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud. Los efectos que genera el consumo frecuente de alcohol, varían de acuerdo a la complexión y organismo de cada persona.

Riesgos a corto plazo:

- Golpes ocasionado por un accidente
- Contagios de enfermedades sexuales
- Dependencia al alcohol

- Embarazos no planeados
- Agresiones y comportamiento violento

Riesgos a largo plazo:

- Presión arterial alta y problemas cardiacos
- Accidentes cerebrovasculares
- Problemas de aprendizaje y memoria

- Depresión y ansiedad
- Demencia y muerte

Infórmate, toma buenas decisiones y sobre todo, aprende a decir ¡NO!

Vive sin alcohol,

Vive sin Drogas