La Asamblea Nacional de Venezuela, dominada por la oposición, aprobó el martes que los diputados participen de manera virtual en los debates, en vista de que una treintena de sus miembros están fuera del país o en la clandestinidad.
La reforma al reglamento interno de los debates de la Asamblea, que no contó con la votación de la bancada oficialista, se dio a pocos días de que el Congreso elija una nueva directiva para el 2020 el 5 de enero, cuando Juan Guaidó buscará la reelección como presidente del cuerpo.
Portavoces de la oposición han denunciado desde hace meses un acoso por parte del Gobierno del presidente Nicolás Maduro, que considera que la Asamblea está en “desacato” porque incumplió un fallo judicial en 2016 que le prohibía juramentar a diputados opositores.
La bancada opositora ha perdido al menos 30 de sus 167 representantes tras el inicio de varios procesos judiciales por causas que van desde traición a la patria hasta conspiración, que llevaron a los legisladores al exilio o la clandestinidad.
Con el voto de las dos terceras partes presentes en la cámara, el Congreso incluyó en tres artículos del reglamento “el uso de tecnologías para la participación virtual” de diputados, cuando denuncien estar bajo persecución o tengan otros motivos personales.
El lunes, la oficialista Asamblea Nacional Constituyente aprobó el enjuiciamiento de otros cuatro diputados opositores acusados por la Fiscalía General de varios delitos.
Henry Ramos, un veterano diputado opositor, advirtió en la sesión que el oficialismo buscaría enjuiciar más legisladores antes de enero.
Hasta ahora, se requería que la mitad de los legisladores o sus suplentes estuviera presente para aprobar las decisiones. El oficialismo, a pesar de sus críticas al Congreso, se reincorporó a la Asamblea en septiembre con al menos 40 diputados y se opuso a la reforma.
Guaidó y otra media docena de diputados denunciaron que partidarios del gobierno intentan presionar para que el líder opositor no logre la reelección. La intención es persuadir a legisladores opositores, muchos de ellos suplentes, a que falten a la sesión y conseguir que buena parte de los curules queden vacíos.
“No nos vamos a vender, no nos van a quebrar (...) Harán cualquier cosa de aquí al 5 de enero y eso no funcionará", dijo el opositor Carlos Valero durante la sesión, en la que otros diputados denunciaron que se ofrecen “maletines con dinero”.
El Ministerio de Información no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre esas denuncias.
Antes de la decisión, el portavoz de la bancada oficialista, Francisco Torrealba, dijo a Reuters que “el voto tiene que ser personalizado y con la presencia de los diputados, no por internet. Esto demuestra el pánico que tienen” en la oposición. “No tienen los votos para la reelección”.
