La subsecretaria de Relaciones Exteriores, Carmen Moreno Toscano, en representación del Gobierno de México presentó hoy al grupo de las veinte economías más avanzadas el G20 el Plan Mundial de Bienestar, que fue anunciado por el presidente Andrés Manuel López Obrador en el Consejo de Seguridad de la ONU en noviembre pasado, que sugiere, entre otras cosas, cobrar el 4% a las grandes fortunas del mundo para apoyar a los países más pobres. Además, se pide que los países del G-20 aporten el 0,2% de su Producto Interno Bruto (PIB) para ayudar a los países más pobres.
La presentación se realizó en la Primera Reunión del G20, bajo la presidencia de Indonesia, que se lleva a cabo en Yakarta.
Al respecto, el canciller Marcelo Ebrard Casaubon aseguró que “fue bien recibido, por fortuna, porque se requiere que el G20 contribuya para ello”.
Uno de los pilares de la agenda de Indonesia para 2022 se orienta a la atención de las necesidades de los sectores sociales vulnerables en países en desarrollo y menos desarrollados, y a resaltar la importancia de contar con mecanismos efectivos para hacer frente a las consecuencias socioeconómicas de emergencias sanitarias futuras.
Bajo esta perspectiva, México explicó al G20 el objetivo del Plan Mundial de Bienestar, el cual busca apoyar, mediante transferencias directas voluntarias, a más de 750 millones de personas que viven en pobreza extrema en el mundo.
La propuesta mexicana fue presentada en primera instancia en una reunión con las economías emergentes del grupo y, posteriormente, en la sesión plenaria sobre Salud y Desarrollo de la Reunión de Sherpas.
México indicó que el G20 puede contribuir sustancialmente a las discusiones en la ONU sobre el establecimiento de esta alianza.
La iniciativa de México fue recibida positivamente por el G20, en particular por los países en desarrollo, que son conscientes de los efectos que la crisis sanitaria ha tenido en el aumento de la pobreza extrema.
