Recientemente se dio a conocer el caso de un conductor de un autobús, quien atentó contra la vida de los pasajeros que estaban a bordo de la unidad vehicular, pues se enteró que su casa había sido demolida.
Los hechos ocurrieron en la provincia de Guizhou el 7 de julio, pero apenas el pasado lunes dio el comunidado la policía local de la ciudad de Anshun.
De acuerdo con los reportes policiales, el conductor decidió salirse del camino para luego chocar con una barandilla; sin embargo, eso provocó que el camión se fuera hacia un lago, por lo que el vehículo terminó por hundirse.
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Tras el accidente automovilístico, 21 personas perdieron la vida, mientras que 15 más resultaron heridas, siendo así que fueron rescatadas por autoridades correspondientes que les brindarían atención médica.
Medios locales mencionaron que en el autobús se encontraban 12 estudiantes que estaban a punto de presentar su examen para ingresar a la universidad. Asimismo, se dijo que el conductor, identificado como Zhang, estaba en condiciones complicadas en su vida.
Momentos antes del choque, el chofer mencionó a su novia que sentía un cansancio por todo lo que estaba sucediendo, además de que se había quedado sin hogar, pues estaba en una zona que entraría en un “proyecto de reconstrucción de barrios marginales”.
Asimismo, antes de comenzar a conducir el autobús, ingresó a una tienda y compró una botella de baiju, un fuerte alcohol chino. De esta forma, fue que decidió provocar el choque que cobró la vida de varias personas.
Cabe mencionar que la demolición forzada de casas es una actividad común en China, pues de esta forma se obtienen nuevos espacios para llevar a cabo proyectos de desarrollo y eliminar las áreas rurales.
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