Tragedia familiar en Australia. En la región metropolitana de Gold Coast, al sur de Brisbane, una desgracia persiguió una familia después de que una niña cayera al fondo de una piscina y, durante el rescate, su padre y abuelo murieron.
El infortunio acontecimiento se registró el domingo por la noche en el ‘Top of the Mark Holiday Apartments', cuando en cuestión de segundos, en un descuido de la familia, la pequeña de dos años que jugaba a la orilla de la alberca resbaló hasta al fondo.
Su madre, a pesar de no saber nadar, se lanzó a la piscina con el objetivo de salvar a la niña, esto provocó que tanto el padre y el abuelo de la pequeña reaccionaran para rescatar a ambas.
Esta situación complicó la maniobra para salvarlas y durante el rescate, a pesar de que lograron acercarlas hasta la orilla, ambos murieron por un paro cardíaco.
Visitantes al complejo, practicaron RCP a los involucrados hasta que llegaron los servicios de emergencia; no obstante, no se pudo evitar la tragedia. En cuanto a la niña y su madre, fueron trasladadas de urgencia al hospital en condición estable.
De acuerdo con los asistentes que se encontraban disfrutando de la piscina, el lamentable suceso se pudo evitar si los familiares hubieran tenido más experiencia nadando, pues la profundidad de la alberca no era para un mayor peligro.
Elementos de seguridad local iniciaron la investigación para delimitar las responsabilidades de la muerte de ambos adultos. Mientras que los servicios de emergencia señalaron que este tipo de desgracias son recurrentes durante este periodo vacacional, pues aumentan a menudo las muertes por ahogamiento.
Los niños corren mayor riesgo de morir ahogados
La Organización Panamericana de la Salud, detalla en un informe que, durante la última década, los ahogamientos han causado más de 2.5 millones de muertes.
“A nivel mundial, las tasas más altas de ahogamiento ocurren entre los niños de 1 a 4 años, seguidos por los niños de 5 a 9 años”, explica la publicación.
¿Qué hacer si alguien se está ahogando?
La Secretaría de Salud de México recomienda que en caso de que observes que alguien se está ahogando, antes de poner en riesgo tu vida intentes acercarlo a la orilla con algún objeto; sin embargo, si ya no hay otra opción que no sea ingresar al agua, deberás llevar contigo un flotador o chaleco salvavidas.
“Cuando ambos estén en un lugar seguro, verifica su respiración observando su pecho en busca de cualquier movimiento. Coloca tu oído sobre su boca para escuchar y sentir la respiración.
“Posteriormente, colócalo de costado, con su cara apuntando ligeramente hacia abajo. Asegúrate de que nada esté bloqueando o cubriendo su boca y nariz. Esta posición ayudará a mantener sus vías respiratorias abiertas”, señalan las recomendaciones.
Finalmente, en la publicación se detalla de que en caso de que el afectado siga con respiración dificultosa, confusión mental o color azul en la piel y los labios, se deberá buscar con urgencia a un médico.
