La siesta es una práctica común en muchos países, pero ¿sabías que la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) recomienda tomar una diaria? En este artículo, explicaré los beneficios de este hábito para la salud y el bienestar. Descubre por qué la prestigiosa institución académica respalda esta costumbre y cómo puede mejorar tu rendimiento y calidad de vida. ¡No te pierdas esta interesante información!
¿Qué es una siesta y cuánto tiempo debe durar?
La siesta es un breve descanso que se toma durante el día, generalmente en las primeras horas de la tarde. Durante la misma, el cuerpo entra en un estado de relajación que ayuda a recargar energías, mejorar el rendimiento físico y mental. De acuerdo con Yereth Torres Damián, académica de la Clínica de Trastornos del Sueño de la Facultad de Medicina de la UNAM, para que sea de calidad, no debe durar más de 30 minutos, ya que dormir más tiempo puede provocar una sensación de letargo al despertar.
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¿Qué pasa si tomo siestas todos los días?
La UNAM recomienda tomar una siesta diaria, debido a los múltiples beneficios que aporta a la salud y al bienestar. Uno de los principales es la disminución de la fatiga, ya que permite al cuerpo recuperarse del cansancio acumulado durante la mañana. Además, ayuda a relajar la mente y el cuerpo, reduciendo el estrés y la ansiedad.
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Otro beneficio importante de tomar una siesta es que ayuda a mantener un estado de alerta más intenso durante el resto del día. Al descansar durante unos minutos, se activan los mecanismos de recuperación del cuerpo, lo que se traduce en una mayor concentración y agilidad mental. Así mismo, la siesta puede mejorar el humor y aumentar la sensación de bienestar, lo que contribuye a una mayor productividad y satisfacción en las tareas diarias.
Por otro lado, diversos estudios han demostrado que tomar una siesta puede mejorar el rendimiento cognitivo y la memoria, lo que resulta beneficioso para estudiantes y profesionales que necesitan mantener un alto nivel de concentración y atención. La siesta también puede ayudar a regular el ciclo de sueño y mejorar la calidad del descanso nocturno, lo que se traduce en una mayor sensación de descanso y vitalidad al despertar.
En pocas palabras, la siesta es una práctica beneficiosa que puede mejorar la salud física y mental, aumentar el rendimiento y la productividad, y contribuir a una mayor sensación de bienestar y satisfacción en la vida diaria.
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