La extraña ballena extinta en el Atlántico que reapareció en la costa de Estados Unidos

En un suceso sin precedentes, el equipo de reconocimiento aéreo del Acuario de Nueva Inglaterra avistó a inicios de marzo una ballena gris frente a la costa de Nueva Inglaterra, al noreste de Estados Unidos, una especie que ha estado extinta en el Atlántico durante más de 200 años.

Los científicos del acuario volaban a unas 30 millas (48 kilómetros) al sur de Nantucket el 1 de marzo cuando avistaron una ballena inusual. “El animal se zambulló repetidamente y resurgió, pareciendo estar alimentándose. El avión de reconocimiento aéreo rodeó el área durante 45 minutos, lo que permitió a los observadores capturar fotografías adicionales. Luego del encuentro, los observadores revisaron las imágenes y confirmaron sus sospechas: se trataba de una ballena gris”, dice el acuario en un comunicado.

“No quería decir en voz alta qué era, porque parecía una locura”, dijo Orla O’Brien, científica investigadora asociada en el Centro Anderson Cabot para la Vida Oceánica en el Acuario de Nueva Inglaterra, quien ha estado realizando estudios aéreos como este desde el 2011.

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El acuario explica que las ballenas grises se encuentran regularmente en el Océano Pacífico Norte y se distinguen fácilmente de otras especies de ballenas por su falta de aleta dorsal, su piel moteada de gris y blanco y su joroba dorsal seguida de crestas pronunciadas.

La especie desapareció del Océano Atlántico en el siglo XVIII, pero en los últimos 15 años se han observado cinco ballenas grises en aguas del Atlántico y el Mediterráneo, incluida la costa de Florida en diciembre del 2023. Los científicos del acuario creen que la ballena gris vista frente a Nueva Inglaterra este mes es la misma ballena que se vio en Florida a fines del año pasado.

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Para los investigadores, los extraños movimientos de las ballenas pueden responder al cambio climático. “El Paso del Noroeste, que conecta el Atlántico y el Pacífico a través del Océano Ártico en Canadá, ha estado regularmente libre de hielo en verano en los últimos años, en parte debido al aumento de las temperaturas globales. La extensión del hielo marino normalmente limita el rango de especies de ballenas grises, ya que las ballenas no pueden atravesar el espeso hielo invernal que normalmente bloquea el Pasaje”, explica el establecimiento.

Ahora, las ballenas grises pueden potencialmente viajar por el Pasaje en verano, algo que no habría sido posible en el siglo anterior.