Muchos residentes de Houston, Texas , se mantienen alertas a su consumo de electricidad durante el incipiente verano, dado que en los últimos años las facturas de este servicio han aumentado considerablemente y temen, además, que el creciente uso implique también algunos cortes.
La ciudad ubicada al sureste del estado, conocida como la capital energética del mundo, es criticada por sus habitantes a raíz de las fuertes subidas que ha habido en los recibos de luz que, según la Oficina de Estadísticas Laborales, tuvieron un incremento de alrededor de un 16% respecto al 2023. Asimismo, el Banco de la Reserva Federal de Dallas publicó un informe donde también reveló que durante el 2022, los texanos pagaron el doble por la electricidad en comparación con los precios previos a la pandemia.
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Cómo la electricidad se convirtió en una idea genial
A pesar del bajo costo del gas natural que alimenta gran parte de la red y de los reducidos precios de la energía en otras partes de Estados Unidos, el Estado de la Estrella Solitaria continúa teniendo costos volátiles que perjudican a su población, ya que deben medir su consumo.
El valor de la electricidad en Texas
Según el profesor de economía energética en la Universidad de Houston, Ed Hirs, la volatilidad está relacionada con cómo se les paga a las plantas de energía en Texas. “Cuando esas plantas de energía están poniendo electricidad en la red es la única vez que ganan dinero, y reciben aún más dinero cuando hay escasez de este servicio”, explicó.
En ese sentido, los expertos señalaron que, cuando el consumo de electricidad aumenta repentinamente, los precios suben 10, 20 o 60 veces. “Esa volatilidad es mala para los usuarios durante condiciones climáticas extremas”, sentenciaron. Por su parte, el consultor y autor del Boletín de Energía y Potencia de Texas, Doug Lewin, dijo a medios locales que, luego de una helada mortal en el 2021 que dejó a todo el territorio sin luz, aún no se han realizado reformas de la estructura desregulada del mercado energético del estado.
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La alta demanda es uno de los mayores factores de riesgo para determinar si Texas tendrá apagones o no durante el próximo verano y por este motivo hay proyectos que ayudarán a las familias de bajos ingresos que tengan dificultades para pagar las boletas. Desiree Davis, quien dirige un programa de asistencia de servicios públicos en la organización sin fines de lucro BakerRipley en Houston, comentó que la necesidad de esta subvención “supera con creces la cantidad de fondos que tienen” pero intentarán colaborar de todas maneras, tal como lo hicieron el año pasado, colaborando con 34 hogares.
