A Cada Quien Su Santo | Reinventando el camino

Al enfermarse de cáncer su esposa, Anselmo, maestro de preparatoria en su pueblo, cae en una profunda depresión que lo lleva a perderse en el alcoholismo y a descuidar a su hijo quien se pierde en las drogas. Al fallecer sus dos seres más queridos, Anselmo decide emigrar a la capital con la esperanza de reconstruir su vida. A través del padre Ambrosio conoce a Mónica, madre de Patricio quien es muy rebelde y está a punto de perder el año gracias a la pésima influencia que recibe de su amigo Jorge, un adolescente prepotente que abusa del poder y del dinero de su padre. Mónica y el padre Ambrosio le piden a Anselmo que ayude a Patricio a estudiar para pasar el año. Después de dudarlo mucho, acepta ayudarlo con sus estudios, pero pese al rechazo del adolescente, la convivencia diaria hace que Anselmo se gane poco a poco, no nada más la admiración y el respeto de Patricio, sino toda su confianza hasta que logran así, gracias a la intercesión de San Agustín.