El volado previo al partido, la plática motivacional previo a que arranque el juego, las toallas terribles hondeando en Haynesfield, e incluso heredarle a cualquiera de tus familiares o amigos la afición a tu equipo favorito.
De igual manera los jugadores de futbol americano heredan su pasión por el juego de generación en generación. El claro ejempló está en el NFL Draft de este año.
Thaddeus Moss llega este año al profesionalismo, él es hijo del mítico Randy Moss, estrella de Vikings y Patriots con una carrera de 15 años en la liga y considerado uno de los mejores receptores de toda la historia.
Por su parte Trevon Diggs, hermano del ex jugador de Minnesota y ahora receptor de Buffalo, Stefon Diggs, tratará de equipararlo pero desde su posición de esquinero.
Hablando de juniors, Antoine Winfield jr. hijo de Antoine Winfield esquinero que jugó 14 años en la nfl, es un prospecto interesante en la posición de safety y tratará de mantener el legado familiar.
Por último tenemos al corredor de Utah, Zack Moss, primo del receptor Santana Moss quien jugara en los Jets y Redskins del 2001 al 2014.
Esta nueva generación viene a rejuvenecer una de las ligas más competitivas del planeta y a partir de su selección en este Draft, comenzará su propio legado en la NFL.