En la colonia Comunal, en el municipio de Lázaro Cárdenas, Michoacán, fue reportado un brutal acto de crueldad animal, después de que un sujeto agredió y atravesó el vientre de una perrita en condiciones de calle.
A través de redes sociales, circuló un video en el que se muestra cómo el agresor se acerca a la canina y la comienza a golpear con una barra de metal, después de presuntamente ladrarle a su hija.
Durante el breve metraje se puede observar que el sujeto descarga su furia contra el animal, mientras esta trata de defenderse y evitar los impactos; sin embargo, segundos después, en medio de ladridos y aullidos de dolor, intenta escaparse.
En uno de tantos golpes por parte del individuo, logra atravesar el vientre de la mascota, lo que le provoca una herida grave.
Ante la mirada sorprendida de varios testigos, presuntamente familiares del agresor, la perrita logra zafarse del metal que la atravesaba y emprende el escape.
Sociedad y colectivos se suman y exigen justicia ante brutal agresión
Luego de que la brutal agresión se hiciera viral en redes sociales, varios usuarios levantaron la queja y pidieron que el agresor sea severamente castigado por el ataque.
Los colectivos contra el maltrato animal también se unieron en contra del agresor y se procedió legalmente después de levantar la denuncia en la Fiscalía.
El terrible suceso fue reportado ante la asociación ‘Huellitas de Corazón LZC', que tras una llamada anónima fue alertada y rápidamente se movilizaron para dar con el paradero del animal.
Tras varios minutos de búsqueda, lograron localizar a la perrita en un estado grave, al tiempo, se percataron de que se encontraba en periodo de lactancia, pues tenía días de haber parido.
Fue a través de otra denuncia anónima que pudieron dar con la localización de los perritos que se encontraban abandonados.
¿Qué sucedió con el agresor?
Después de que la perrita fuera intervenida y le salvaran la vida, ahora se encuentra en tiempo de recuperación, mientras sus perritos son cuidados por miembros del colectivo.
Por su parte, el agresor se encuentra siendo investigado y de acuerdo al Código Penal estatal, podría tener una condena de seis meses a dos años de prisión y multa de cincuenta a quinientas veces del valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA).
