Naciones Unidas, 24 Sep (Notimex).- La Asamblea General de la ONU, cuya reunión de alto nivel reunirá a más 120 jefes de Estado y de gobierno en su sede en Nueva York, arrancará este martes en un entorno dividido entre nociones de soberanía y cooperación internacional.
El plenario iniciará con un discurso del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien ha defendido el multilateralismo como el único enfoque con que la comunidad internacional puede abordar fenómenos como el cambio climático o la migración internacional.
La cooperación, ha explicado Guterres, es esencial igualmente para abatir el tráfico de personas, el terrorismo internacional, las amenazas cibernéticas y el comercio ilegal de armas y de drogas. Por su parte, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, expresó el domingo a su llegada a la sede de la ONU, que “no nos agrada el enfoque unilateral que están promoviendo algunos de los miembros de la ONU. Señaló que la Unión Europea (UE) es la prueba de que “el enfoque multilateral no está muerto. Tiene que mantenerse. Sin mencionarlo por su nombre, Juncker aludía probablemente al mandatario que se ha distinguido como el principal defensor de la soberanía y el nacionalismo, el presidente Donald Trump, cuyo discurso ante el plenario será dedicado a tales temas, según la representación de Estados Unidos.
En menos de dos años de gobierno, Trump ha retirado a Estados Unidos del Pacto de París sobre cambio climático, pese a que este fenómeno es concebido por el sistema de la ONU como la mayor amenaza para la sobreviviencia del planeta. Estados Unidos se ha retirado también del Consejo de la ONU para los derechos humanos, así como de la Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y ha amagado con separar a Estados Unidos de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Este retroceso de Estados Unidos de la arena de la cooperación internacional se ha visto expresado igualmente por la guerra comercial iniciada contra China, la segunda mayor economía del mundo, y con la imposición de tarifas a socios y aliados internacionales.
La visión de Trump quedó claramente delineada el año pasado cuando ante el plenario de la Asamblea General dedicó su alocución a detallar el concepto de “Estados Unidos, primero, lo que ha significado una disminución notable de su participación en organismos multilaterales.
Este mismo lunes fue patente el enfoque de Estados Unidos al presentar un documento en que llama a reforzar la cooperación internacional contra el problema de las drogas. En contravención a las normas de la ONU, el texto no fue sometido a negociación ni a opiniones de los 130 países que lo suscribieron. Entre las naciones que también han enarbolado claramente visiones que apelan a la soberanía destacan Hungría, Polonia y el nuevo gobierno de Italia, que han formado un bloque que rechaza la migración y la entrada de refugiados bajo el concepto de que los extranjeros suponen una amenaza cultural.
Al margen de las posturas ideológicas, los conflictos más graves del mundo probablemente no verán ningún beneficio de la actual reunión de líderes mundiales en la ONU. Observadores destacan por lo menos el avance en el diálogo entre Corea del Norte y su vecino del sur, y los positivos acercamientos que ha tenido el régimen de Pyongyang con Estados Unidos para concretar sus promesas de desnuclearización.
Apenas el año pasado, Trump había advertido que Corea del Norte sería “totalmente destruida si continuaba con sus ambiciones nucleares. Esa tensión ha disminuido. No obstante, la guerra en Siria continúa, con la amenaza de que una ofensiva montada por el gobierno, con apoyo de Rusia e Irán, para retomar la ciudad de Idlib cree la mayor emergencia humanitaria en los siete años de guerra en esa nación. Asimismo, no hay ningún viso para contribuir en esta semana a la resolución del conflicto en Yemen, ni tampoco de acercar posiciones en torno a la disputa entre Israel y Palestina.
En ese entorno se presentará el martes el presidente Enrique Peña Nieto para ofrecer su último discurso al frente del gobierno de México ante el plenario de la Asamblea General de la ONU, en que probablemente resaltará los logros de los seis años de su administración. México, quien apenas en julio impulsó la aprobación del Pacto Mundial para la Migración, se ha destacado como un firme impulsor del multilateralismo. El país será así una de las voces que se unan para contrarrestar la poderosa voz de Estados Unidos y sus anhelos de soberanía.
