En 2015 Chris saltó a la fama por el peso récord de su lana, pero este martes sus cuidadores la despidieron con gratos recuerdos y afirmando que “era mucho más que eso, mucho más, y lo recordaremos por todo lo que fue: alguien, no algo”.
La oveja merio australiana tenía alrededor de 10 años y fue hallado muerto al interior del Santuario Little Oak, una organización benéfica que da refugio a más de 180 animales de granja con sede en Canberra, Australia.
Kate Luke, cofundadora y vicepresidenta del Santuario Little Oak, dijo: “Estamos desconsolados por la pérdida de este alma dulce, inteligente y amigable. Chris es conocido en el mundo como la poseedora del récord por tener la lana más pesada registrada”.
Hace cuatro años fue descubierto en las afueras de Canberra, la capital de Australia, luchando por caminar bajo el peso de su lana, que no había sido esquilada en más de cinco años.
De acuerdo con Reuters, “los 40,2 kilos de lana removida del animal en 2015, por un valor de unos 413,6 dólares a precios actuales, lo convirtieron en el portador no oficial de la lana más pesada del mundo, destronando al borrego neozelandés Big Ben, que fue encontrado portando casi 29 kilos de lana en 2014".
