Ciudad de México. El 30 de mayo de 2014, la cancha del Estadio Azteca se vistió de gala para recibir a Boca Juniors y River Plate en superclásico organizado por el banco patrocinador de ambas escuadras.
Si bien en aquel entonces, los dos equipos venían plagados de jóvenes promesas que en la actualidad son referentes en sus equipos e incluso en la selección, fue un buen espectáculo.
El juego quedó empatado a un gol en tiempo regular, con tantos de Daniel Villalva, por el Millo, y de Claudio Riaño, por el Xeneize, y tuvieron que definir al ganador desde los 11 pasos. Ahí fue más certero River y se llevó el título de la Copa.
Ese juego tuvo varias curiosidades: algunos futbolistas de ambos equipos tuvieron un pasado en la Liga MX y otros llegaron al balompié azteca, como Daniel ‘Cata’ Díaz, exjugador de Cruz Azul; Juan Forlín, de Boca, llegó a Querétaro; Marcelo Barovero fue a Rayados; Villalva pasó a Veracruz y tiempo después, Leonel Vangioni fue contratado por Rayados de Monterrey y Ariel Rojas por Cruz Azul.
Además, otros jugadores que gozan de buen cartel en Europa y la Selección Argentina, también estuvieron en el Azteca, como Giovani Simeone, hijo del entrenador del Atlético de Madrid; Manuel Lanzini, compañero de Javier ‘Chicharito’ Hernández en el West Ham; Ramiro Funes Mori, del Villarreal, y Gabriel Mercado, del Sevilla.
Por si fuera poco, días después de ese partido, Marcelo Gallardo asumió como técnico de River Plate, para convertirse en uno de los técnicos más ganadores en la historia del club de La Banda.