Nunca antes había disfrutado del fútbol como ahora, quizás porque como decía mi abuela: uno no sabe disfrutar lo que tiene a la mano hasta que deja de estarlo, y con la complejidad de los tiempos que vivimos; el fútbol sabe mejor.
Hablar cualitativamente de Jiménez es echarle flores a diestra y siniestra pero curioso resulta hacerlo comparándolo con sus números, rendimiento, goles (que de eso vive y come un delantero) y ahora se plasma una vez más el momento que vive tras el gol de volea frente al Burnley que resulta en puntos para su equipo y la continua lucha por estar pensando en competencias europeas a pesar del indulto al Manchester City.
Raúl ha madurado y hoy sus goles son puntos para el Wolverhampton ( su nombre es un continuo cantar en la grada de la afición de los lobos) su calidad le permiten seguir consolidando su trayectoria en el viejo continente.
Los números de Jiménez esta temporada en la Premier League con 17 goles, un par de ellos en partidos consecutivos - los últimos dos-, 26 en la temporada (sumándole los 9 en la Europa League), además de 10 asistencias y que siguiendo por esa línea cuantitativa representa el cincuenta por ciento de los puntos del equipo.
8 victorias, 4 empates y siguiendo la lógica básica de sumar entre partidos jugados, puntos conseguidos por el equipo, de los 56 de los Wolves… el rendimiento del delantero representan 28 puntos. Al final eso es lo más importante en cualquier aspecto, que un jugador y lo que haga dentro de la cancha (en un ámbito individual) resulte en un éxito en lo colectivo.
Jiménez sigue su romance con el gol, con la afición inglesa y mexicana a pesar de la distancia y sobre todas las cosas; ayuda a que el fútbol sepa mucho mejor.