¡De Ecatepec para el mundo! Con solo 18 años y poco más de 2 metros de altura, Gael Bonilla está llamado a convertirse en el símbolo de la nueva era de la Selección Mexicana de Básquetbol . En 2012, se incorporó a una de las academias más prestigiosas en España, Canarias Basketball Academy. Dos años más tarde, llamó la atención del Barcelona, a partir de ahí, comenzó su aventura que cambiaría por completo su vida.
Te interesará: México debutó con triunfo en su clasificación
“Tuve un torneo con el real Madrid y al final me contactó el Barcelona, pude irme después de estar dos años en gran canaria, después de eso pude llegar con ellos”, comentó el joven que milita en el Barcelona en entrevista para Azteca deportes.
Los inicios de Gael
Gael nació en Ecatepec, es el menor de dos hermanos que crecieron en las duelas, y son ellos, los que lo han mantenido siempre con los pies en el suelo.
“Somos muy unidos en casa, somos cuatro personas, tengo a mis dos hijos y mi esposa, a pesar de la distancia ya que él radica en Barcelona, tenemos comunicación todos los días”, afirma el padre de Gael, Edgar.
Familia apasionada al deporte
El joven de la Selección Mexicana considera que está en una familia apasionada por el deporte ráfaga. “Siempre toda mi familia ha sido de deportes, mi padre jugaba básquetbol, nos encaminó a mi hermano y a mí, fue desde los 6 años que empezó mi pasión por el básquetbol”, dice Gael.
Joya del Barcelona
Hoy Gael es considerado una de las joyas del Barcelona y ya es comparado en México con grandes nombres como el del “Titán” Gustavo Ayón. “Cuando era más joven lo veía en cancha (Ayón) y ahora que hablen así de mí, es una emoción que te vean, que te conozcan”, afirma el jugador azteca.
¿Futuro en la NBA?
Aquel niño que se fue a Europa en busca de un sueño, ya es una realidad. Y por qué no pensar que en unos años más, juegue en el mejor basquetbol del mundo, la NBA.
“Que disfrute como en los primeros años cuando solo lo hacía por diversión y mas ahora que eres profesional, al final cuando eras un niño sólo lo hacías por diversión. Le diría que lo disfrutara porque al final pasa el tiempo volando”, comentó Gael sobre que le diría a aquel niño que partió al viejo continente en busca de cumplir sus sueños.