Torreón, Coahuila. La Partida, en Torreón, es uno de esos lugares mágicos para Oribe Peralta. El delantero de las Águilas del América no olvida sus orígenes ni el sitio donde todo comenzó y volvió a su sitio de origen.
Durante sus vacaciones, Peralta recordó aquellos grandes momentos cuando era pequeño y soñaba con ser un delantero de élite mientras le pegaba al balón y lo trababa de meter en medio de dos ladrillos.
Esto lo hizo jugando una ‘cascarita’ con unos pequeños en las calles de su lugar natal. El delantero compartió este momento a través de sus redes sociales con una foto, en la que se ve jugando con niños, acompañada de la frase “Donde todo comenzó...”.