En estos momentos la NFL analiza la posibilidad de sancionar severamente a los Titanes de Tennessee, en caso de determinar que el equipo no ha cumplido los protocolos anti-COVID. Ya son 13 casos positivos en la franquicia, lo que obligó a posponer por varias semanas su partido ante los Acereros de Pittsburgh.
Eso, sumado al aplazamiento del duelo entre los Patriotas y los Jefes de Kansas City, ha puesto a la liga a barajar opciones para que el torneo pueda llevarse a cabo con la mayor normalidad posible.
Lo anterior obligaría a tener solo una semana entre los juegos del campeonato y el Super Bowl, pero no sería algo nuevo.
Después del brote de los Titanes y las pruebas positivas con muchos otros equipos, la NFL realizará una llamada este lunes con los entrenadores en jefe y gerentes generales de toda la liga para enviar un mensaje contundente: “si queremos terminar esta temporada, no puede haber complacencia.”