La investigación por el crimen contra Julián sigue en pie, sin embargo, las sospechosas están muy bien respaldadas pues a la hora de rendir declaración todas deciden mentir, librándose así de cualquier castigo que pudieran aplicarles la ley. Por otro lado, Salomón está preocupado de que Natalia elija un bando y que Altagracia logre convencerla de que los Salvatierra son unos ladrones.