Sinsheim, Alemania. Luego de los insultos que sus aficionados lanzaron contra Dietmar Hopp, propietario del Hoffenheim, directivos del Bayern Munich descalificaron el comportamiento y llamaron al futbol alemán a tomar acciones en contra de estos actos.
Cuando los bávaros goleaban 6-0 con amplia comodidad, en el partido de la jornada 24 de la Bundesliga, sus seguidores que se dieron cita en la Rhein-Neckar-Arena, desplegaron una pancarta para ofender al empresario.
Karl-Heinz Rummenigge, director general del Bayern, se dijo avergonzado de los acontecimientos, por lo que ofreció disculpas Hopp, a quien elogió y reveló que reunieron pruebas en video para identificar a los responsables.
“Estoy profundamente avergonzado por este caos. Ha llegado el momento en que todo el futbol alemán actúe en conjunto contra estos hechos. También avergonzado con Dietmar Hopp, quien es un excelente hombre de honor y me disculpé con él”, sentenció tras el partido.
Sobre las acciones que tomará el equipo agregó que: “No hay excusa para este resultado. Hemos filmado los eventos y vamos en contra de las personas responsables, quienes han desacreditado profundamente al Bayern”.
Destacó las acciones de los jugadores de ambos conjuntos, quienes se negaron jugar la recta final del partido y sólo dominaron el balón, en protesta por los hechos. “La forma en que los jugadores lo hicieron en los últimos minutos es una señal absoluta. Fue una idea de ellos consulta con el árbitro”.
Por su parte, Hans-Dieter Flick, director técnico de los bávaros, se fue decepcionado de la afición, pues sus actos dejaron de lado la actuación de los jugadores y aseguró que son eventos complicados de evitar.
“Siento tanta decepción. El rendimiento de todo el equipo fue tirado a la basura. Son cosas que te causan perplejidad y rabia. Los jugadores no sabían nada. Yo sabía que podía haber algo planeado, pero no puedes evitarlo. De una manera u otra siempre logran introducir el material en el estadio”, acotó.
