Recientemente, Tom Brady ha dado de qué hablar por temas que se desarrollan fuera del emparrillado; sin embargo, él no pierde el enfoque y apunta al ámbito deportivo, aunque su perspectiva dista de ser la más optimista.
El inicio de la actual campaña de la NFL se ha caracterizado por una extraña paridad entre la mayoría de los equipos. Hasta antes del duelo de lunes por la noche entre los Broncos de Denver y los Colts de Indianápolis, 15 escuadras ostentaban una marca de dos juegos ganados y dos perdidos.
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Tom Brady no se calló y se fue contra el bajo nivel de la NFL
Desde el punto de vista del veterano pasador, esto no es un síntoma de alta competitividad, sino de una mediocridad a la que pocas veces se ha referido, como lo hizo al ser cuestionado en rueda de prensa, ofrecida por los Buccaneers de Tampa Bay.
“Hay mucho futbol americano malo por lo que veo, veo demasiado y sí, futbol americano de baja calidad, eso es lo que veo”, respondió, a la pregunta que buscaba conocer el diagnóstico de quien muchos consideran el mejor jugador de todos los tiempos.
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Luego de cuatro semanas —y arrancada la quinta— en la National Football League, las 32 organizaciones del circuito saben lo que es obtener un triunfo. Esto no sucedía desde hace más de 30 años y, aunque es probable que el desenlace se lleve a cabo con mayores distancias, no todos han mostrado fascinación por el igualado nivel y las brechas reducidas.
El único equipo invicto de la liga son los Eagles de Filadelfia, cuya calidad no es puesta en tela de juicio, aunque los rivales a los que han doblegado (Detroit, Minnesota, Washington y Jacksonville) sí generan dudas sobre su domino tempranero. Este domingo 9 de octubre, visitarán Arizona y pondrán en juego su récord de 4-0 ante los Cardinals (2-2).
