Una joven española se llevó una gran sorpresa al descubrir que había crecido en una familia que no era suya, pues fue cambiada al nacer por un error humano cometido por personal médico de un hospital que fue demolido hace varios años.
Todo comenzó en 2002, cuando la joven, ahora de 19 años, nació en el Hospital San Millán de Logroño, localizado en La Rioja, al norte de España. El nacimiento de la bebé por la que fue intercambiada ocurrió el mismo día, con cinco horas de diferencia.
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Ambas niñas pesaron poco al nacer, por lo que fueron trasladadas a la sala de incubadoras, donde el error humano del personal médico terminó con dos mujeres que se fueron a casa, cargando a bebés que no eran suyas.
La joven se enteró que fue cambiada al nacer gracias a su abuela materna, quien interpuso una denuncia contra el supuesto padre biológico por negarse a solventar los gastos de alimentación de la menor.
El abogado de la joven, quien prefirió conservar el anonimato, explicó a medios internacionales que ella estuvo bajo el cuidado de su abuela debido a las “discapacidades e incapacitaciones de sus progenitores formales”.
Cuando la abuela interpuso la demanda en 2017, el padre alegó que la jovencita no era su hija y los tribunales ordenaron que se sometiera a una prueba de ADN, misma que le dio la razón al hombre.
Otras pruebas y análisis revelaron que la chica había crecido con una madre y una abuela que no eran su familia biológica. En ese momento se inició una investigación para dar con el paradero de sus verdaderos padres.
La joven que fue intercambiada al nacer pide una indemnización millonaria
En 2018, la joven y sus abogados solicitaron a la Consejería de Salud de La Rioja que investigara las circunstancias de su nacimiento que la llevaron a crecer con una familia que no era suya.
Tras descartar algunas variables, los investigadores llegaron a la conclusión de que el error humano se produjo en la sala de incubadoras, donde las bebés se colocaron en cámaras neonatales contiguas, la seis y siete.
A pesar de enterarse que fue cambiada al nacer, la joven no podrá conocer a su madre biológica pues falleció en 2018. Ahora, lo que pide la afectada es una indemnización de tres millones de euros por concepto de responsabilidad por daños morales.
“Fue un error humano puntual que hoy no puede repetirse”, reconoció Sara Alba, ministra de Sanidad del gobierno de La Rioja, tras revelar que la dependencia le ofreció a la chica una compensación de 215 mil euros, menor a la que ella solicitó.
Estamos a disposición de las familias para darles todo el apoyo que puedan necesitar, manteniendo la confidencialidad y respeto que requieren este tipo de situaciones.
Alba confesó que no será posible concluir quién cometió el error y entregó a las bebés con familias equivocadas, debido a que los registros de hace 20 años no estaban “informatizados con tanto detalle”.
El hospital donde la joven fue cambiada al nacer identificaba a los bebés con una huella digital, posteriormente se cambió a una huella de las plantas de los pies y en la actualidad es a través de una muestra de sangre del cordón umbilical.
“Han cambiado mucho los sistemas de identificación en estos años, son más seguros y confiables, sería prácticamente imposible que algo así volviera a ocurrir”, concluyó la ministra.
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