Un módem de internet puede distribuir la señal de WiFi por varios lugares, pero en ciertos casos, el aparato no puede ser tan potente para cubrir todas las áreas de la casa.
En este sentido, a veces es necesario emplear un repetidor de WiFi, que es un aparato que retoma las ondas de internet inalámbrico y las difunde de nuevo en las zonas a donde no llegan originalmente con el router principal.
¿Qué tan bueno es usar un repetidor de WiFi?
Un repetidor de WiFi ayuda a mejorar la señal de internet inalámbrico en zonas de la casa donde no llegue originalmente, debido al alcance del módem o porque éste se ve obstruido por muros o muebles pesados.
El costo de estos aparatos puede ser reducido si lo comparamos con otras soluciones, como un módem más poderoso o un sistema de red mesh, o de malla.
¿Cómo funciona un repetidor de WiFi?
Un repetidor de WiFi tiene dos partes: un receptor y un transmisor, en el cual el receptor se encargará de recibir las señales de WiFi con el fin de amplificarlas y emitirlas con su transmisor.
Algunas de las ventajas de este tipo de dispositivos es su fácil instalación y configuración. Sin embargo, algunos problemas son que dependen de la capacidad del módem WiFi y su alcance puede estar limitado por obstáculos físicos como muros o muebles.
¿Cómo conectar un repetidor de WiFi?
Los pasos para conectar un repetidor de WiFi pueden variar de acuerdo con el fabricante. En general, pueden ser configurados de la siguiente forma:
- Conectar el repetidor a un enchufe lo más cerca posible del módem.
- Esperar hasta que la luz del repetidor de WiFi comience a parpadear.
- Presionar el botón WPS del módem durante unos segundos y después apretar el botón del repetidor durante 10 segundos.
- Esperar hasta que el repetidor se conecte con el módem.
- Después de que esté enlazado, será posible cambiar el repetidor a una zona más alejada donde nos interese recibir las señales de internet inalámbrico.
