La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, mejor conocida como NASA, envió miles de gusanos al espacio para estudiar enfermedades como la distrofia muscular.
La NASA, a través de una misión de SpaceX y la Agencia Espacial de Reino Unido, envió los gusanos, conocidos como caenorhabditis elegans a la Estación Espacial Internacional para analizar las afectaciones que la gravedad provoca en los músculos.
El envío de gusanos al espacio forma parte de una serie de experimentos que tienen como objetivo identificar las moléculas que provocan la distrofia muscular, afectación que debilita los músculos gradualmente. También busca encontrar nuevas terapias para prevenir la pérdida de masa muscular en gravedad cero.
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Estos estudios también son realizados para investigar los cambios en los músculos que ocurren con los vuelos espaciales, a fin de poder desarrollar terapias más efectivas y nuevos tratamientos para la pérdida de masa muscular relacionada con la edad y la distrofia muscular.
Gusanos sufren cambios similares a la distrofia muscular
Los gusanos que fueron enviados al espacio por la NASA sufren cambios musculares similares a los que provoca la distrofia muscular en las personas. Investigaciones anteriores han revelado que estas especies microscópicas de cerca de un milímetro de largo experimentan cambios musculares y metabólicos en el espacio.
Para este experimento, la NASA utilizó la misión CRS-22 que partió desde el Centro Espacial Kennedy en Florida, para lanzar los gusanos llamados “C. elegans” al Centro Espacial Internacional. Después los colocarán en una incubadora durante un máximo de seis días para su estudio.
De acuerdo con algunos reportes de la NASA, el vacío del espacio provoca que los astronautas pierdan hasta el 40% de músculos tan solo en medio año fuera de la Tierra.
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